dimarts, 4 de setembre del 2012

Le quería, quizás como a nadie antes.

Metió la cabeza bajo el grifo y dejó correr agua fría hasta que empezó a tiritar. Salió al comedor, después de coger una toalla, y se dirigió hacia la habitación en la que dormía. Su casa estaba irreconocible. Desde que había llegado a su vida estaba cambiada. Allí en su cama, estaba durmiendo él, sólo com una sábana que cubría su cuerpo, que anteriormente había desnudado ella misma. En la fina seda se reflejaba su cuerpo. En estos momentos, le parecía aun más perfecto que antes. Secándose el pelo con la toalla se metió en la cama. Se acurrucó junto a su cuerpo, que aun estaba caliente, y se despreocupó de todo. Le quería, quizás como a nadie antes. 


Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada