diumenge, 27 de maig del 2012

Las sonrisas sinceras no se fuerzan.

"Te daría mi vida si la aceptaras, no tengo nada que arriesgar si esto se queda en nada. Solo quiero que me quieras como yo te quiero y punto. Solo quiero que algún día estemos juntos."

divendres, 25 de maig del 2012

When your best friend says that you're thinking.

 

Esa persona que sabes que quiere lo mejor para ti, y tú para ella. Esa persona que no es tu amiga. Es tu hermana. Esa persona que es más de lo que puedes pedir y te dá más de lo que te mereces. 
Que sí, que no hay persona que no hiera con palabras, ni hay ser humano que no haga daño con sus manos. No hay ser vivo que sea al cien por cien bueno, pero, ¿y qué más dá? Ella no es perfecta. Pero yo tampoco lo soy. 
En mi vida, he perdido muchas cosas. He dejado escapar a personas que, a lo mejor, no merecían que las dejase ir nunca. He perdido amigas, a las que no sé si dar las gracias por haberse ido. Y a día de hoy, solo tengo clara una cosa. Solo sé algo que nadie parece saber, o que sí lo saben y no me lo quieren decir. Solo sé que no quiero perderte nunca. Quizás parezca irónico, o tantas veces estúpido. Pero solo quiero que sepas, que no lo quiero hacer. No quiero perder a la única persona que ha sido capaz de estar cuando nadie lo ha estado. La única que me ha sacado sonrisas tantas veces, y la única que me ha demostrado ser amiga cuando parecía que nadie lo era. O la única que promete que no me va a dejar nunca y se esfuerza en demostrarlo. 
Y no le busques motivos a esta entrada, es simplemente que hoy me he sentido con ganas de desmotrarte que me importas. Quiero que sepas, que por muy estúpida o sabionda que sea, o por muy borde que en un momento pueda pareces, la amistad que tenemos y lo mucho que quiero que estés a mi lado, no lo cambia nadie. Ni una persona, ni una actitud, ni siquiera un destino. 
Y lo que ya te he dicho muchas veces, que te quiero. 

dijous, 24 de maig del 2012

Buenas noches, princesa.

Es tarde. Todo el mundo duerme y está todo oscuro. Pero tú no consigues dormir de ninguna manera. 
Al otro lado de tu ventana, con la cortina todavía subida, ves las pequeñas luces del párking que tienes delante. No son vistas bonitas, pero tampoco esperas tener una playa preciosa delante. No ves a nadie, todo está parado y en silencio, pero no te extraña. Por la hora que es, sería raro que aun hubiese alguien por la calle. Quizás incluso te asustaría. Te quedas en silencio y intentas hacer el mínimo ruido. Comprobado. Esta noche no será buena. La habitación que tienes encima de ti hoy està en silencio. Es la primera noche que no se escuchan ruidos. Solo una mujer que no para de dar vueltas sobre la cama. Hoy la pareja que vive encima tuyo no hace el amor. La alegria que cada noche llega a tu habitación y al resto del edifio hoy no      está. Suspiras e intentas dormir cerrando los ojos. Aunque estás con los ojos cerrados mucho tiempo, no lo consigues y vuelves a abrirlos, medio enfadada porque todo el mundo duerme menos tu. Incluida la vecina de arriba, que esta noche duerme sin ningún acompañante, pero duerme. Miras el reloj. Las cuatro y media. Sonríes irónicamente mientras maldices las fuerzas subrenaturales que hoy no te dejan dormir. Te das golpes de cabeza contra el cojín. Estás cansada pero no puedes dormir. Te levantas, en silencio para no despertar a nadie. Te sientas en la silla de tu escritorio para poder aprovechar de algún modo la noche. Pero nada. Hoy tampoco tienes inspiración. "¡Qué asco de noche, joder!", piensas. Podrías aprovechar para hacer deveres de verano que aun no están ni empezados y ríes pesando en la descabellada idea que acabas de tener. Cierras la luz del escritorio y bajas la cortina, pero dejar la ventana abierta porque hace mucho calor. Te pones en la cama, decidida, esta vez sí o sí te vas a dormir. "Buenas noches, princesa", te dices a ti misma, ya que no tienes a nadie para que te lo diga.  



I'm not Adele. I don't wish "nothing but the best" for you. Die bitch.


dimecres, 23 de maig del 2012

Que no me digan que me calme, ni que me espere, que exploto con la facilidad de un bomba y que la paciencia nunca la he tenido.Voy a ser la más adicta de cada uno de mis vicios, aunque me hagan daño, como tú.Voy a seguir arreglandome hasta para ir a comprar el pan. Voy a seguir fingiendo ser lo que no soy. 

Vous êtes un idiot de charme.

Te quiero. Te odio. Te adoro. Te detesto. Me vuelves loca. Me pones de los nervios. ¡Ven!. ¡Vete!. Bésame. No te acerques a mí. Di que me quieres... Di que me odias. ¡Pasa de mí! .¡Mírame todo el rato!. Eres un idiota. Eres un idiota encantador. 















Mi mayor problema eres tú.

Sí, creo que tengo un problema con el rechazo. Es bastante difícil de explicar, no creo que sea el hecho de sentirme rechazada, es la sensación de no poder ser la persona que le genere ese sentimiento a alguien. Me río de chistes sin gracia y accedo a comportarme como quizás no soy en realidad. Mi problema es no saber decir "no" y tampoco poder escucharlo. 
Mi problema es que tiemblen mis piernas al tenerte cerca. 

dimarts, 22 de maig del 2012

Desearle suerte a un rival es sinónimo de decirle "No lo vas a tener fácil conmigo"

Quizás uno de los errores que cometemos con más normalidad es de querer ver los fracasos del resto. Vamos, admítelo, tú tampoco te quieres morir sin ver el primer suspenso del 'cerebrito' de tu clase.
Admitir que te has equivocado es declarar que eres más inteligente que antes. 

divendres, 18 de maig del 2012

Mis peores pesadillas no tienen monstruos. Tienen espejos.

¿Sabes? Quizás nunca te has dado cuenta, pero soy una de esas adolescentes que tiene miles de complejos. Que no se mira en un escaparate de un tienda para ver lo bien que le sienta todo. Soy una de esas chicas que, al mirarse en el espejo, ve solo su reflejo. Nada más. Pero un reflejo que duele. Un reflejo del que meses atrás estaba orgullosa. Hoy, en cambio, me he hartado de seguir siempre al resto. Nunca he destacado físicamente en comparación con el resto de gente. Tampoco me he pasado horas y horas maquillándome. Ser natural me hace sentir más... especial. No soy una chica con un cuerpo diez, ni con una cara preciosa. No soy una chica que destaque, no soy perfecta ni quiero serlo. No tengo los ojos más bonitos del mundo, y quizás mi cuerpo deja mucho que desear. Me como las uñas y tengo las piernas feas. 
Mucha gente se toma a broma todo esto. No creen que piense realmente esto. "Solo quieres llamar la atención y que te digan lo bonita que eres", dicen. Realmente me hacen gracia. No saben nada. 
Procuro esconderme detrás de mi seguridad, cuando por dentro soy indefensa. Tengo carácter, pero a veces lo uso contra quien menos lo merece. No puedo controlar mis impulsos. Se me nota mucho cuando alguien me gusta realmente y odio tener que decirle "no" a alguien que ha tenido el valor de declararse. No me gustan las injusticias, aunque a veces yo pueda ser injusta conmigo misma. No me sé valorar.
Me sorprenden las chicas de mi edad que se quieren, que se ven realmente guapas (lo sean o no), las que la tienen autoestima a "tres metros sobre el cielo", o las que no viven siguidas siempre por el miedo que les dan sus inseguridades. Ojalá yo fuera así...
Pero no lo soy. Soy del montón, una más. Simple. Sencilla. Nada especial. Solo yo. 
¿Qué, me dirás que no duele mírarte al espejo y no querer ver tu reflejo porque no te gustas? Decírte que eres guapa y creértelo no sirve de nada. Hace mucho que yo dejé de creérmelo. Me canso de repetirme que el físico no importa. Cansa que las personas que más te importan te digan que eres preciosa y no poder creértelo. Cansa hacer ver que no te importa, que no eres superficial. Cansa ser quién no eres. Cansa soñar que alguien fijará sus ojos en ti, y dejará de mirar a otras porque no habrá visto a persona más perfecta que tú. Y, cansada de todo, decidí ponerme maquillaje y lápiz de ojos; ponerme ropa que antes no me habría puesto para intentar dar el pego de algo que no existe. Y ahora, me doy cuenta que mis lágrimas son negras y feas, y mis pestañas parecen postizas. Pero yo lo quise así. Creía que así parecería feliz, aunque no lo fuera.

Te paras a pensar si hay un lugar para ti en esta sociedad. 


Un sabio dijo una vez...


Estoy orgullosa de que todo sea sin ti.

No supiste ver que ella era feliz a tu lado , y tú feliz al suyo. No supiste ver que le partiste el  corazón en mil pedazos y tampoco supiste ver todas las lágrimas que fueron desperdiciadas en ti. Pero date cuenta de que le hiciste mucho daño. Y algo así no merece ser recordado. Ella ya no está , date cuenta de una vez. Consiguió vivir sin ti , sin tus alegrías , sin tus tristezas. Consiguió sacarte de su vida y así , tener ella la suya. Y consiguió volver a ser feliz.

Esa gran sensación.


Y la mejor sensación, es sentarse a tu lado, darte un beso y darme cuenta de que merece la pena. 

dijous, 17 de maig del 2012

Cuestión de confianza.


Enfadarse con alguien que ha contado un secreto tuyo. ¡Enfádate contigo, que no has sabido guardarlo! 

Despedida.

Nos miramos, y el dolor que vi en sus ojos superaba el miedo y la pena que sentía por mí misma. Cerró los párpados y alzó la cara hacia el techo; si no le conociera, habría pensado que estaba rezando.
Entonces dijo:
- Quiero que bebas de mí.
- No tengo sed de sangre -susurré.
- No me has entendido. - Lucas hizo una inspiración temblorosa-. Bianca, quiero que bebas de mi sangre hasta matarme. Quiero que cambies. Quiero que te conviertas en vampira.
La estupefacción me dejó sin habla. Solo podía mirarle con la boca abierta.
- Sé que hace tiempo decidiste no convertirte en vampira -continuó. Tomó mi mano entre las suyas-. Pero se diría que no tienes elección. Si para salvarte has de hacer eso, tampoco es tan horrible. Podrías volver junto a tus padres. Ser eternamente joven y bella.
No era tan sencillo, y los dos lo sabíamos. No obstante, si Lucas estaba realmente dispuesto a dar ese paso conmigo, podía considerarlo.
- Tú también te convertirías en vampiro -dije-. Haríamos el cambio juntos. ¿Te ves capaz?
Lucas negó con la cabeza.
- No.
- ¿Qué?
- Bianca, tienes que prometerme, tienes que jurarme por lo que más quieras en este mundo, que una vez que esté muerto medestruirás antess de que vuelva en mí. No permitas que resucite como un vampiro. Quiero morir.
De modo que podía aceptar mi transformación pero no la suya. La frágil esperanza que había sentido durante unos segundos se hizo añicos.
Lucas tiró del cuello de su camisa, dejando su cuella al descubierto. Quedamente, repitió:
- Bébeme.
- Quieres que te mate -susurré-. Darías tu vida por salvarme.
Me miró como diciendo que era algo obvio, algo necesario, y los ojos se me llenaron de lágrimas.
- Sé lo que hago -dijo. Las sombras de la habitación le enmarcaban la cara como si la luz lo enfocara solo a él-. Estoy listo. Lo último que sabré es que tú estarás bien. No necesito nada más.
Sacudí la cabeza.
- No.
- Sí -insistió, pero todavía me quedaban fuerzas para oponerme.
- ¿Cómo esperas que siga viviendo sabiendo que diste tu vida por salvarme? Viviría torturada por el sentimiento de culpa, Lucas. No puedo. No me pidas que haga eso.
- ¡No tienes que sentirte culpable! ¡Quiero que lo hagas!
- ¿Podrías tú? -le pregunté-. ¿Podrías matarme, aunque fuera para salvar tu propia vida?
Me miró fijamente, tratando sin conseguirlo de imaginarse haciendo eso.
- Tienes que prometerme que tendrás una buena vida -dije-. Que no te pasarás los días llorando mi muerte.
- Oh, Dios. -Lucas contrajo el rosto y supe que estaba al borde de las lágrimas. Enterró la cara en las mantas y posé una mano en su pelo-. Bianca, por lo que más quieras, hazlo. Sálvate. -Pude ver en sus ojos que su determinación comenzaba a flaquear, que si le insistía me dejaría convertirlo en vampiro. Pero sabía que para él eso sería mayor sacrificio aún que morir. Comprendí entonces que no podía pedirle que lo hiciera, ni para salvarme a mí, ni por ninguna otra razón.
- No -dije, y esta vez sabía que comprendería que mi respuesta era definitiva-. Prométemelo, Lucas.
- ¿Qué clase de vida quieres que tenga sin ti? Tú eres lo único bueno que me ha ocurrido en la vida.
Rompí a llorar. Lucas me apretó la mano con fuerza. Luego apoyó la cabeza en mi hombro y me reconfortó saber que al menos lo tenía cerca. 
Transcurrido un rato, ya no pude seguir sosteniendo su mano con la misma fuerza. Me pareció que las sombras de la habitación se oscurecían. La preocupación de Lucas fue en aumento, pero no podía prestar atención a sus palabras, y tampoco tenía fuerzas para responder. 
Me trajo agua, pero apenas pude beber. Me venció el sueño -creo que era sueño- y cuando desperté tuve la impresión de que había pasado mucho tiempo. 
Lucas estaba con la espalda y las manos apoyadas contra la pared, como si la estuviera sosteniendo. Su mirada era desesperada.
Al ver que estaba despierta, dijo:
- He estado a punto de pedir una hambulancia. No serviría de nada, pero aquí tampoco puedo hacert nada por ti.
- Solo deseo tenerte cerca -susurré. El pecho me pesaba enormemente. Me costaba mucho hablar.
Un fuerte escalofrío me recorrió por dentro. Mi cuerpo se me antojaba demasiado pesado y febril para poder soportarlo. Quería salir de él. Quería liberarme.
Lucas debió de leer en mi rostro lo que estaba sintiendo, porque abrió los ojos de par en par. Se acercó y me puso una mano en la mejilla. Durante unos segundos buscó algo que decir, pero finalmente susurró:
- Te quiero.
- Te qui... -No pude terminar la frase. La habitación se sumió en la oscuridad y el rostro de Lucas desapareció. Sería tan fácil dejarse ir.
Me entregué a la marea que tiraba de mí hacia abajo.
Y fallecí. 

Despedida, Claudia Gray.




dimarts, 15 de maig del 2012

Antes habría jurado que me casaría con él algún día.

¿Para qué negarlo ahora? Sí, me he imaginado tantísimas veces una vida junto a ti... una vida entera. Nos imaginaba tumbados en un sofá, en nuestro sofá de cuero rojo, combatiendo el inevitable aburrimiento de los domingos. Nos imaginaba de viaje juntos, descubriendo las maravillas del mundo. Nos imaginaba colándote en el cine y riéntode de mí porque yo no hubiera tenido el valor de pasar sin entrada. Nos imaginaba a ti y a mí, paseando por la calle y riéndote de mis celos cuando mires a otra. Nos imaginaba de tantas formas y maneras... pero al final siempre era lo mismo. Siempre terminábamos juntos, felices. Para toda la vida. Siempre. Sí, ese siempre que me prometiste cuando me dijiste que nunca me dejarías, que siempre estarías a mi lado; pero dime... ¿dónde estás ahora?

diumenge, 13 de maig del 2012

Fallo tras fallo. Nunca aprendo.


El invierno ya se ha ido al igual que tus manos cálidas en mi cara. Se ha marchado y se perderá con el paso del tiempo como mis sentimientos. Ahora lloro, sufro. Ahora me duele saber que aprendí a vivir contigo sabiendo que me ibas a fallar como tantas veces has hecho. Me duele porque pasé los mejores momentos de mi vida a tu lado. Y me duele porque malgasté el tiempo sin tú haberme necesitado.
Y ahora, mírame. Plánteandome la manera de escapar de aquí sin dejar rastro. Volviendome loca, rompiendo todo lo que una vez fuimos y tú no quisiste serlo más. Destrozando y pisoteando lo que fue de aquel nosotros. Y nuevamente, empezar de zero para buscar a alguien que verdaderamente esté enamorado de mí.
Me sigue rompiendo el alma verte marchar. 

dissabte, 5 de maig del 2012

Y en un minuto, en un instante todo se va a la mierda. ¿Así de simple? ¿Cómo puede estar sucediento tan rápido todo? ¿Qué ha pasado? Desearía poder parar el tiempo y dar marcha atrás para ver en qué punto empezaron a ir mal las cosas. Intentar olvidar tus besos, tus caricias, tus formas de hacerme reír... no es tan fácil como se ve. Lo sé, todo se ve fácil desde fuera... hasta que te pasa a ti. Y desde dentro, viviéndolo en tu propia piel, duele. Mucho. Echas de menos decirle 'Hola' y que tarde milésimas de segundo en responderte. Necesitas oírle decirlo. Solo una vez más. Por última vez. La última. Solo una vez... necesitas que te susurre un 'te quiero'. 

Jugar con fuego sin terminar quemándose.

Disfrutaré del momento, disfrutaré de la música y sobre todo no dejaré que esto acabe. Si te crees más que yo, te equivocas. ¿Sabes? He decido que a partir de ahora no habrá nadie superior a mí, ni yo seré superior a nadie. ¿Sientes mis latidos? Son adictivos. Mi cuerpo es como el fuego, ardiente. Ahora está encendido, y la gente observa las llamas que resaltan, voy a derretir el hielo molesto que se me cruce. Mi estilo es superior, aunque no desde tu punto de vista. Ahora solo mando yo. Tocaré el cielo para darte una lección, ¿Crees que puedes superarme? Permíteme dudarte. Yo soy simplemente yo, y no voy de lo que no soy.

Dicen que me has olvidado, que en tus palabras ya no hay amor... que ya no hay nada. Malditas lenguas que saben más que yo, siendo la protagonista o la antagonista de nuestra historia, como mejor quieras verlo tú. Pero, ¿qué más dá? ¿Qué más dá si ya me has olvidado?
¿Sabes lo gracioso de todo esto? Que me importe tanto, si es verdad. Porque sí, aun tiembla mi piel cuando escucho tu nombre. 

El primero que se enamore, pierde.

I heard you're a player. So let's play a game. Let's sweets talk. Let's play fight. Let's tell each other good morning and good night every day. Let's take walks together. Let's give each other nicknames all everyone. Let's hang out with each others' friends. Let's go on dates. Let's talk on the phone all night long. Let's hold each other. Let's kiss and hug. And whoever falls in love first? Loses.


PARÍS!

6 de Mayo de 2012. 

dijous, 3 de maig del 2012

dimecres, 2 de maig del 2012

3MSC.

Que su hija esté con un tipo que va por la vida en moto, dando bandazos a 200 km por hora, porque no quiero darme cuanta de lo que pasa a mi alrededor. Pero de repente aparece alguien que te dice que tranquilo, que aflojes. Y cuando aflojas... te das cuenta de las cosas. Te das cuenta de que en la estantería hay un trofeo de baile entre las botellas de Tequila, que está sonando mi canción favorita, que hoy es martes y trece, y que ella se fugaría contigo ahora mismo a cualquier parte del planeta. Cosas pequeñas. Tu hija me enseña a ir despacio, y eso me sienta bien.