dijous, 12 de juliol del 2012

Porque tú eres mi cielo.

No quiero morir, no quiero ir al cielo porque ya estoy en él. 
Rezaba para que pudiéramos acabar juntos. Al principio era como desear lluvia estando en el desierto. Pero me conformaba estando abrazada lo más cerca posible de ti. Porque tú eres mi cielo. Sigues siendo imprescindible para mí. Y lo más raro de todo, es que yo también lo sigo siendo para ti. No sé cuánto durará esto, es imposible saberlo. Pero, ¿sabes? Nunca podré decir que fuiste un error, porque me haces sentir la persona más feliz del mundo. 

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada